Muerta, por fin, muerta,
por fin, sin saldo en el reloj,
pero sin necesidad de cuenta.
Muerta, de vuelta a casa,
regresar con la mochila a cuesta
de afectos, de experiencias,
festejando el fin de la cosecha.
Muerta, sin dolor ni remordimientos
Muerta, explorando el abismo de mis adentros.
y regresar al origen de mis ancestros,
Muerta, ingrávida, ligera como el viento
Muerta, sin miedos ya que me retengan
donde el abandono ya no sale a cuentas.
Muerta, en un plano que ya no me espera,
al otro lado de la misma existencia.
La moneda al aire,
la caída a tierra
En cualquier caso,
muerta,
pero siempre eterna.
Octubre24©LilianaT
